Estamos invirtiendo $500 millones de dólares para reforzar nuestra red en los próximos años y asegurarnos que nuestro sistema esté aún más preparado contra las amenazas del clima extremo. Estamos instalando postes resistentes al fuego, mejorando la resistencia de las líneas eléctricas y utilizando información climática en tiempo real de una avanzada red de cientos de estaciones meteorológicas. Al adaptarnos a fenómenos meteorológicos extremos, desde incendios forestales a tormentas invernales, nos enfocamos en mantener las luces encendidas para nuestros clientes y comunidades todo el año.

Nuestros equipos aéreos y terrestres trabajan duro para identificar peligros potenciales y eliminarlos antes de que se conviertan en un problema. Nuestro equipo de arboristas y otros profesionales revisan si los árboles están saludables, despejan la vegetación alrededor de los postes y podan las ramas para reducir el riesgo de que la vegetación entre en contacto con las líneas eléctricas. Todo esto forma parte de nuestros esfuerzos para garantizarles un servicio confiable a nuestros clientes y darle prioridad a la seguridad dentro de nuestras comunidades.

Si hay una interrupción del servicio, te mandaremos una notificación para que puedas planear tu día. Tú decides cómo quieres recibir estas notificaciones — por mensaje de texto, correo electrónico o una llamada.